Luego de muchas operaciones experimentales en animales, se logró la confianza y la habilidad para intentar un trasplante en humanos. Se sabía en ese entonces que la genética influye en gran parte al éxito o fracaso en un trasplante, no se contaba con inmunosupresores para evitar los rechazos. Es por eso que las primeras pacientes fueron las hermanas Paliza. Ambas pudieron regresar a realizar sus vidas normalmente luego de operación por muchos años.
Fue un esfuerzo conjunto entre un grupo de jóvenes médicos y otros profesionales de la salud del Centro Médico Naval. Los medicos que conformaron este equipo fueron Herbert del Alamo, Orlando Gianotti; Luis Caballero, Rolando Uribe, Jorge Meza, Reynaldo Aguilar, Ricardo Angulo, Romeo Melendez, Manuel Sovero, Carlos Marchena, Alfonso Zavaleta, Luis Campos y Guillermo Manrique Lara. Este logro marcó el comienzo de muchas otras operaciones y la motivación para otras instituciones lograr este objetivo.